viernes, 5 de marzo de 2021

MITOLOGÍA - La lira de Orfeo -Año XI. Nº 648

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Gustave Moreau - Orfeo - 1865
Gustave Moreau - Orfeo - 1865  (Museo d'Orsay, París)

 

Pintura

En la mitología griega, el genio poético y musical de Orfeo era tanto que incluso encantaba a los animales salvajes. Por desgracia encantó a las Ménades, que lo descuartizaron tras la muerte de Eurídice, para castigarlo de haber rechazado sus insinuaciones. Moreau prolonga el mito, mostrándonos a una chica joven, ataviada con ropas orientales, que recoge la cabeza del poeta. ¿A caso pretende esta bondadosa virgen hacer olvidar la locura de las Bacantes? La cabeza descansa encima de la lira del poeta, mientras que la jovencita le echa una mirada melancólica. Ambos rostros, de ojos cerrados, de una extraña semejanza, parecen absortos en una infinita contemplación. Al horror del suplicio evocado, sucede esta apaciguada escena que misteriosamente se salva de la morbidez, sumergida en una luz crepuscular, sobre fondo de paisajes fantásticos a la Leonardo. La composición oblicua recuerda un naipe, donde los músicos de la esquina superior izquierda hacen eco a las tortugas, abajo en la derecha, cuyo caparazón había servido, según el mito, a fabricar la primera lira.

Música

Orfeo, S.98 (Orpheus) es un poema sinfónico compuesto por Franz Liszt entre 1853 y 1854. Es el cuarto de su ciclo de doce poemas sinfónicos escritos durante su periodo en Weimar. Fue interpretado por primera vez el 16 de febrero de 1854, dirigido por el propio compositor, como una introducción de la ópera de Christoph Willibald Gluck, Orfeo y Eurídice.

La trama de la ópera de Gluck tuvo poco que ver con la creación del poema sinfónico de Liszt; más bien se limitó a incrementar el interés del compositor por el protagonista del título. Liszt había visto con anterioridad un vaso etrusco en el Louvre, que representaba la figura mitológica de Orfeo cantando, tocando su lira y domesticando los animales salvajes a su alrededor. Esta imagen fascinó al compositor, que vio en Orfeo un símbolo de la influencia civilizadora de la música y las artes sobre los instintos básicos de la humanidad. “Orfeo”, a diferencia de otros de sus poemas sinfónicos, no retrata ningún conflicto, ni fracaso ni victoria. El tema principal, introducido por las trompas y las arpas, imita la lira de Orfeo.


Franz Liszt - Orfeo, poema sinfonico No. 4, S. 98

1 comentario:

  1. En el invierno de 1853-54 el Teatro de la Corte de Weimar estaba ensayando el Orfeo ed Euridice de Gluck con Liszt como director. Durante los ensayos Liszt decidió escribir un preludio y un epílogo orquestales a la ópera de Gluck. Su objetivo no nacía de un deseo de hacer una reconstrucción histórica. Más bien al contrario, pues el Liszt de 1850 quería poner la composición del siglo XVIII entre comillas románticas. De este modo la música del preludio y la mucho menos conocida del postludio nada tienen que ver con la ópera de Gluck como tal, pero tienen todo que ver con el carácter del personaje de Orfeo.

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