Pablo Picasso - Mujer con gallo - 1938 (Museo de Arte, Baltimore) |
Pintura
A Picasso le encantaban toda clase de animales. Su peculiar bestiario estaba formado por aves —palomas, gallos y búhos— así como por perros, gatos, toros, caballos y cabras que aparecen reiteradamente en sus obras. En este caso representa un gallo en el momento anterior a su muerte a manos de una mujer sentada, que lo sujeta con fuerza de las alas con una mano, mientras en la otra sostiene un recipiente destinado, presumiblemente, a recoger su sangre. En el suelo se encuentra el cuchillo con el que el animal será sacrificado.
Música
No se sabe la fecha exacta de la publicación que realizó el compositor francés Jean-Philippe Rameau, a sus propias expensas, de sus Nouvelles Suites de Pièces de Clavecin. La mejor aproximación la sitúa entre febrero de 1726 y el verano de 1727. A esta colección pertenece la Suite en Sol mayor/sol menor al que pertenece el movimiento titulado La Poule (la gallina)
En palabras de Olivier Baumont, clavecinista que ha explorado el universo musical francés de los siglos XVII y XVIII, virtuoso intérprete de la obra para tecla de Rameau «la gigantesca Gallina es un brillante y terrorífico ensayo sobre la malicia». En ella reproduce el cacareo de una gallina en el corral y sigue las evoluciones del ave en el transcurso del día, desde sus correteos enloquecidos al nervioso picoteo del grano. El maestro repite machaconamente el Bajo Fundamental en los acordes en ostinato de la mano izquierda, mientras la derecha desgrana las modulaciones que permite el acorde mayor en todas sus inversiones. El salto intensamente repetido, acorde tras acorde, en la sucesión armónica, es un intento de genio para conseguir que los obtusos oponentes a sus teorías interioricen los sonidos del acorde fundamental, tan natural como los movimientos de un ave común y tan abundante como la gallina.
Jean-Philippe Rameau - La Poule - Suite en Sol Mayor