 |
| Martin Johnson Heade - Singing Beach, Manchester - 1862 (Museo Thyssen, Madrid) |
Pintura
Existen al menos otras tres obras de Heade, realizadas entre 1861 y 1863, que representan la costa de Manchester desde Singing Beach. Esta zona alcanzó gran popularidad entre la clase alta de Boston, que la convirtió en su lugar de veraneo. Es probable que el pintor la eligiese por sugerencia de alguno de sus mecenas. En este caso el encuadre da protagonismo al promontorio de Eagle Head, que cierra la playa a la izquierda. Las aguas están salpicadas por veleros, una isla y otros brazos de tierra lejanos. Sobre el mar en calma se reflejan las nubes rosadas del horizonte.
Música
La mer, trois Esquisses Symphoniques vertido orquesta (el mar, tres bocetos sinfónicos para orquesta), o, simplemente, La mer (el mar), es una composición orquestal (L 109) debida al compositor francés Claude Debussy. Inició la obra en 1903 en Francia y la terminó en 1905 en Eastbourne, en la costa inglesa del Canal. El estreno estuvo a cargo de la Orquesta Lamoureux, bajo la dirección de Camille Chevillard, el 15 de octubre de 1905 en París. El primero de sus movimientos se titula "De l'aube à midi sur la mer" (“Del alba al mediodía en el mar”)
Se trata de una obra maestra de la sugerencia y de la sutileza en su rica descripción del océano, que combina una inusual orquestación con la audacia de armonías impresionistas. La obra ha demostrado ser muy influyente, y su uso de colores tonales sensuales y sus métodos de orquestación han influido en muchas bandas sonoras de películas posteriores.
Mientras que la forma de la obra la sitúa fuera tanto de la música absoluta (que no describe nada) como de la música programática (que sí trata de describir con mayor o menor detalle una realidad), tal como se entendían estos términos en el siglo XX, es obvio que utiliza recursos descriptivos para sugerir el viento, las olas y el ambiente del mar. Sin embargo, la estructuración de una pieza en torno a un objeto natural, sin ningún elemento literario o humano asociado a él – ni personas, ni mitología, ni barcos se sugieren en la misma - fue muy inusual en aquella época.
Claude Debussy - I. Del alba al mediodía en el mar - El mar
¿Sabías que de no haber sido lo que fue, a Debussy le hubiera gustado ser marino? La sincera pasión que el compositor sentía por este elemento de la naturaleza nació con él y le acompañó a lo largo de toda su vida. De hecho, en su adolescencia estuvo destinado “a la grata carrera de marinero”, circunstancia bastante probable teniendo en cuenta que su padre trabajaba como oficial de la marina, lo cual se vio truncado por las vicisitudes de la vida.
ResponderEliminar