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| Bernardo Bellotto - Plaza de la Signoria en Florencia - c. 1741 (Museo de Bellas Artes de Budapest) |
Pintura
El cuadro de Belloto representa una vista de la Plaza que constituye el centro político de la ciudad de Florencia. En esta gran perspectiva se encuentra el Palacio Vecchio, la Loggia dei Lanzi, la fuente de Neptuno de Buontalenti, el león, emblema de Florencia, la estatua ecuestre de Cosme I de Médicis, la de Cacus y el David de Miguel Ángel. Algunos edificios como la pequeña iglesia de San Romolo a la izquierda del cuadro ya no existen, pero el lugar ha conservado gran parte del aspecto que conocemos hoy en día. A la derecha del palacio se puede divisar el Corredor de Vasari así como una parte del gran cuerpo arquitectónico de los Ufizzi que fue construido en el Cinquecento en plena época manierista, el museo de los Oficios es hoy uno de los más importantes del mundo.
Música
Julius Fucik es bien conocido en Norteamérica por su marcha Entrada de los Gladiadores, Op. 68, mientras que en Europa lo es por otra marcha, Florentiner Marsch, Op. 214, escrita alrededor de 1913, durante el largo periodo de tiempo en que fue líder de la banda militar del Real Ejército Imperial.
La marcha comienza con una alegre fanfarria de trompeta, contestada por flautas y tambores. Las cuerdas (esto se escucha en su versión orquestal) desarrollan la fanfarria en una melodía digna de la familia Strauss. Los metales se hacen cargo del segundo motivo, tras lo cual los instrumentos de viento tienen su oportunidad en un tema, ahora adornado con un centelleante glockenspiel. La segunda sección es un himno, que ensalza a los militares, combinado con una caprichosa marcha a cargo de los vientos, casi una burla infantil de la melodía de apertura. El himno, no obstante, recupera su dignidad en un gran final a cargo de toda la orquesta.
Julius Fucik - Florentiner, Marsch op. 214
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ResponderEliminar¿Sabías que, por las anotaciones de su diario, la pieza se completó el 3 de diciembre de 1907 como "La Rosa di Toscana"? No se puede determinar con certeza por qué la rebautizó como "Marcha florentina". Probablemente el editor de Fucik tuvo algo que decir en esto y es concebible que las consideraciones políticas también jugaran su papel.