Pierre-Auguste Renoir - Le Moulin de la Galette 1876 (Museo d'Orsay, París) |
Pintura
Aunque el pintor decidió representar a algunos de sus amigos, se esforzó ante todo por reflejar la atmósfera vehemente y alegre de este establecimiento popular de la Butte Montmartre. El estudio de la multitud en movimiento bajo una luz a la vez natural y artificial se trata mediante pinceladas vibrantes y coloreadas. El sentimiento de que las formas se diluyen fue una de las causas de las reacciones negativas de los críticos de la época. Por su tema anclado en la vida parisiense contemporánea, su estilo innovador y también su formato imponente, signo de la ambición del enfoque de Renoir, este cuadro constituye una de las obras maestras de principios del impresionismo.
Le Moulin de la Galette era uno de los templos del ocio parisino, un verdadero molino abandonado situado en la cima de Montmartre, el paraíso de la bohemia parisina habitado por artistas, literatos, prostitutas y obreros. Los domingos y festivos eran días de baile en Le Moulin, llenándose con la población que habitaba el barrio. Una orquesta amenizaba la danza mientras que alrededor de la pista se disponían mesas bajo los árboles para aprovechar la sombra.
Le Moulin de la Galette era uno de los templos del ocio parisino, un verdadero molino abandonado situado en la cima de Montmartre, el paraíso de la bohemia parisina habitado por artistas, literatos, prostitutas y obreros. Los domingos y festivos eran días de baile en Le Moulin, llenándose con la población que habitaba el barrio. Una orquesta amenizaba la danza mientras que alrededor de la pista se disponían mesas bajo los árboles para aprovechar la sombra.
Música
El vals Frohes Leben fue compuesto en el verano de 1869, que Josef Strauss pasó en Pavlovsk, cerca de San Petersburgo, junto con su hermano Johann y la esposa de éste, Jetty. Los hermanos viajaron a Rusia con el objetivo de asegurar para Josef, en los sucesivos años, el lucrativo negocio de verano en el Pabellón de Vauxhall en Pavlovsk. Pero la compañía ferroviaria, que organizaba todos los conciertos y bailes para los visitantes de San Petersburgo, retrasaba la decisión, lo cual descarriló los planes de los hermanos Strauss. Esto causó una comprensible depresión a 'Pepi’, a propósito de la cual escribió a su esposa Caroline, que habían permanecido en Viena, el 10 de septiembre 1869: “No se me ve bien, estoy más pálido, mis mejillas están huecas, he perdido mi cabello, me estoy volviendo sordo a todo, no tengo ninguna motivación para trabajar, toda mi imaginación está aquí oprimida por el aburrimiento total y una indefinida monotonía. La incertidumbre en que vivo, sin saber si voy a ser contratado o no, me hace más enfermo e infeliz”.
A pesar de esto, Josef Strauss tituló este vals Frohes Leben (Vida feliz), que interpreta por primera vez, unos días antes de la citada carta, en un concierto en Pavlovsk (el 6 de septiembre de 1869) Pudo no haber sido capaz de convencerse plenamente a sí mismo, a través de este trabajo, de creer en un futuro brillante, pero el vals, no obstante, es interesante y tiene gran valor. Es el vals de un verdadero Strauss, cuyo padre había popularizado el lema: "¡Se alegre, incluso en tiempos difíciles!"
Después de su regreso a Viena desde Pavlovsk, lugar que nunca volvería a ver ya que la esperanza de obtener el contrato nunca se materializó, interpretó el vals Frohes Leben por primera vez el 14 de noviembre 1869 en la Sofiensaal. Josef Strauss murió en Viena el 22 de julio de 1870.
Después de su regreso a Viena desde Pavlovsk, lugar que nunca volvería a ver ya que la esperanza de obtener el contrato nunca se materializó, interpretó el vals Frohes Leben por primera vez el 14 de noviembre 1869 en la Sofiensaal. Josef Strauss murió en Viena el 22 de julio de 1870.
Josef Strauss - Frohes Leben, Walzer op. 272